Las Manualidades de Laura

Pintar es una actividad relajante, que ofrece una gran cantidad de beneficios para el que practica este arte, como pueden ser el incremento que experimenta la autoestima, la disminución del estrés, y como no, el orgullo de poder exponer tus obras en la mejor sala de exposiciones del mundo: nuestro hogar, mostrando a todos nuestra nueva afición y sobre todo nuestra progresión, que irá a pasos agigantados.

Para empezar debemos saber que no es igual pintar tejas nuevas sin usar, que tejas antiguas y usadas, por la rugosidad y aspereza que presentan éstas ante la increíble perfección de las nuevas. También debemos elegir adecuadamente las pinturas a utilizar en este menester, pues pintar con óleo es mas complicado que hacerlo con acrílicos e incluso con pinturas plásticas.

Lo más adecuado para pintar unas bonitas tejas decorativas, con el fin de decorar nuestro hogar es elegir tejas nuevas y pinturas acrílicas, por la facilidad de aplicación y limpieza que este tipo de pinturas nos ofrecen.

Preparar las tejas es muy importante, lo primero que debemos hacer es lavarlas con agua abundante y realizar dos orificios para colgarlas, después dibujar el motivo que queramos pintar, o al menos, trazar unas guías para que el dibujo nos quede centrado. Una vez dibujado el motivo en la teja, es aconsejable cubrir con una fina capa de pegamento-cola, para sellar los poros y tener una superficie buena para pintar, esperar el secado del pegamento, que aparecerá de forma transparente, dejándonos ver, el boceto inicial que previamente dibujamos.

Pintar directamente sobre la teja, resulta desagradable, pues el material en que están fabricadas las tejas, generalmente suele ser poroso, absorbiendo gran cantidad de pintura y dejándonos en una situación difícil de controlar, pues no podremos extender la pintura de la manera en que nosotros deseemos, este proceso no nos llevará mucho tiempo, y a partir de aquí, lo mas divertido.... a pintar¡¡¡¡

Una vez terminado nuestro despliegue de arte, dejamos secar bien la pintura y le aplicamos un barniz especial para este tipo de trabajos, que también se usa como sellado final, en óleos sobre lienzo, para impedir que la humedad, el polvo y cualquier otro agente externo, dañe nuestro pequeño tesoro, ademas de facilitar la limpieza, pudiendo hacerlo con un trapo ligeramente humedecido.

Solo nos queda elegir un lazo, cuerda o adorno adecuado para el dibujo y la decoración de la casa para colgar nuestro tesoro.

Aqui os dejo algún ejemplo de lo que he conseguido hacer con mis propias manos, espero que os guste...